Cada persona tiene los dientes de un blanco distinto. El color natural de los dientes y su evolución es diferente en cada individuo. El color de los dientes nos viene definido por el color de la dentina, el grosor y la calidad del esmalte; y puede verse alterado por hábitos alimenticios ( consumo de tabaco, té, café, vino tinto…), una higiene bucal deficiente o el uso de medicamentos, entre otras causas.
Herencia Dental
Los genes influencian el color de los dientes y cómo evolucionará con el paso de los años, así como la transparencia de la dentadura y su grosor, que son los responsables directos del color. Los dientes gruesos y opacos responden mejor a los tratamientos blanqueadores de los dentistas. La transparencia es el único elemento que no puede corregirse con un tratamiento blanqueador. Pregunta a tu dentista cuál es la causa de la decoloración de los dientes en tu caso.
Hábitos alimentarios
Algunos hábitos alimenticios como el consumo regular de café, té, vino tinto, refrescos u otras bebidas gaseosas y con colores fuertes afectan al tono de los dientes. Actúan en dos niveles: el color natural del esmalte es el blanco. Un alto consumo de té y café en grandes cantidades irá dejando una capa que acabará por penetrar en el esmalte de los dientes. Los alimentos ácidos, como los cítricos o el vinagre, contribuyen a erosionar el esmalte.
El resultado es que la capa del esmalte se vuelve más fina y transparente, con lo que se puede ver la dentina, que es de color amarillo. Como consecuencia, los dientes tienen un aspecto amarillento. Dado que el color amarillento de los dientes se debe en parte a unos malos hábitos alimenticios, la primera acción importante es, sencillamente, limitar el consumo de los alimentos que manchan. No hace falta prohibir el té, el café ni las comidas ácidas, basta con consumirlos con moderación.
Medicamentos que amarillean los dientes
Algunos medicamentos pueden oscurecer los dientes. Por ejemplo: la tetraciclina, un antibiótico que puede dejar marcas grises oscuras o marrones. El flúor ayuda a combatir la aparición de caries, por eso se recomienda su administración a los niños.
Sin embargo, un exceso de flúor mientras los dientes se están formando (ya sea a través de dentífricos fluorados, agua rica en este elemento o la prescripción de otros suplementos) puede provocar fluorosis, que se manifiesta con la aparición de pequeñas manchas blancas entre los dientes.
Golpes y fisuras: posibles causas del amarilleo de los dientes
El esmalte de los dientes puede verse afectado por fisuras o microfisuras causadas por rechinar los dientes o por caídas y accidentes.